El chat y yo

Debo decir, sin ánimo de ofender a ninguno de mis lectores, que soy parte de una generación ideal. Un par de años mayor habría sido viejo y otros tantos años menor, muy joven (hablo en general, deben haber excepciones en ambos casos)

Resulta que tuve la fortuna (sí, fortuna) de vivir toda mi infancia sin tener acceso a un computador y mucho menos a internet, pero alcancé a disfrutar de las bondades de este último desde la edad precisa, es decir, tercero medio (16 años).

Disfrute de una infancia sana, haciendo deporte, compartiendo con amigos, jugando a los típicos juegos como la escondida, paco ladrón, entre otros, callejeando lo justo y necesario, haciendo trabajos escolares con el Icarito, escribiéndolos a mano! y no fue sólo hasta la adolescencia que pude acceder a un computador primero (13 años) y a internet después (16 años).

Hoy realmente me apena como los niños pasan chateando, jugando counter strike y afines, dejando de lado el compartir cara a cara con los amigos y dando el paso al sedentarismo que mi generación no da sino hasta la adultez por motivo laborales o académicos.

Pero bueno, la idea era hablar de mi relación con el chat. Siempre lo he encontrado impersonal, frío y además un medio que facilita la malinterpretación de las palabras. En un principio no entendía porqué mis compañeros de colegio estaban idiotizados, por ese entonces, con el ICQ. Nos veíamos todos los días y ellos chateaban todas las noches sagradamente. Yo me sumé a la masa tardíamente y ciertamente le hallé el gustito, pero sin perder mis prejuicios.

Cuando ICQ fue desplazado por el MSN yo pensé que sería una moda pasajera destinada a desaparecer. Con esa idea en mente cree mi cuenta de hotmail en Septiembre del año 2002 y le puse pablog_2003 adelantándome un año y sin pensar que hoy, entrado el 2007, seguiría teniendo msn :P

Para mi nunca fue una herramienta para conocer gente, mis contactos siempre eran conocidos en persona. Lo más cercano que estuve a chatear con desconocidos fue jugando trivia en IRC y resultó ser que conocí gente en extremo buena onda con los cuales pasamos a compartir uno que otro carrete y una que otra pichanga. Mientras tanto, el MSN seguía ocupando la misma función de siempre.

Paralelamente, al estar en IRC uno está sujeto a que cualquier persona te hable (a diferencia del MSN que se puede bloquear para personas fuera de la lista) y claro, yo no era la excepción. Siempre me hablaba gente y yo nunca respondía hasta que un día, no me pregunten porqué, respondí un mensaje y además di mi MSN.

Desde ese momento empecé a creer un poco más en el destino y a ser menos escéptico en todo lo que es esoterismo. Ese día, 22 de Agosto del 2005, apareció en mi vida la mujer más importante en la misma hasta el día de hoy. No fue mi polola ni mucho menos, simplemente se transformó en mi amiga, mi confidente y, fundamentalmente, en la inyección anímica que por ese entonces necesitaba para atreverme a hacer un magister. Al mismo tiempo, aprendí realmente a valorar a un amigo, a decir "te quiero", a preocuparme por los demás y no sólo de mi, cambié en 180º.

Ahí estaba yo entonces, debiéndole a un medio del que tanto renegué mi presente y, porqué no decirlo, parte de mi futuro. Si bien sigo encontrando "freaks" las relaciones que se dan sólo por chat, hoy las miro con otros ojos y trato de entender a quienes confiesan, por ejemplo, pololear por chat =/ No tengo problema con chatear con gente que no conozco en persona siempre y cuando podamos mantener una conversación interesante, es más, a veces cuando no quieres hablar con nadie conocido agradezco esa posibilidad!

No puedo decir que tengo muchos cyberamigos ni mucho menos, pero creo que hay uns 5 personas con las que converso con cierta regularidad sin conocerlas y me siento gratificado pues son grandes personas y, sin duda, un aporte en mi vida.


Saludos a todos